Los silenciosos labios derramados y desde el fondo habladme toda esta larga noche como si yo estuviera con vosotros anclado, condtame todo, cadena a cadena, eslabón a eslabón, y paso a paso, afilad los cuchillos que guardasteís, ponedlos en mi pecho y en mi mano, como un río de rayos amarillos, como un río de tigres enterrados, y dejadme llorar, horas, días,años, edades ciegas, siglos estelares.
Dadme el silencio, el agua, la esperanza.
Dadme la lucha, el hierro, los volcanes.
Apegadme los cuerpos como imanes.
Acudid a mis venas y a mi boca.
Hablad por mis palabras y mi sangre.
De Alturas de Macchu Picchu
Pablo Neruda
Preciosas palabras!
ResponderEliminarBesito.